Territorios de la Memoria-España nace en Valladolid en el año 2012 con el objetivo de crear un espacio de debate y de trabajo que, siguiendo el modelo de Les Territoires de la Mémoire-Lièja, defienda la memoria como vía necesaria en la construcción de una sociedad más democrática, que no repita errores pasados, siguiendo los tres principios de verdad, justicia y reparación reconocidos por las Naciones Unidas.
Ambas asociaciones comparten unos fines comunes: la defensa de los derechos humanos y la necesidad de reivindicar el movimiento memorialístico para no olvidar a las personas perseguidas por defender las libertades en Europa, con independencia de su nacionalidad.
Territorios de la Memoria-España apuesta por otorgar un papel fundamental a la memoria social e histórica en la educación y la formación. Todos sus proyectos se basan en el principio necesario de educar contra el olvido de las barbaries y las injusticias, porque es responsabilidad de todos defender la libertad, la paz y los valores democráticos, que no se podrán transmitir a las jóvenes generaciones si les ocultamos los horrores y los genocidios de nuestra Historia.
Este grupo considera que la resistencia frente al olvido y el avance de las ideas totalitarias que afloran e intentan legitimarse en el marco de la actual crisis global debe hacerse con actividades que fomenten la participación de todos en la construcción de una sociedad democrática que garantice las libertades fundamentales. Más que nunca hay que ejercitar la conciencia crítica, porque la memoria de las generaciones que nacieron en democracia se ha construido sobre un limbo en el que no se han reconocido, valorado y dignificado a todos aquellos que con enormes sacrificios conquistaron los derechos que creíamos para siempre y que, sin embargo, están en equilibrio precario. La democracia es un proceso histórico en construcción continuada, que requiere de convicciones, actitudes y acciones comunes, que son las que presiden cualquier actividad de este grupo.
La asociación española tiene su sede en la Universidad de Valladolid, donde los valores de tolerancia y concienciación ciudadana para la consolidación de las libertades y la convivencia democrática se promueven de forma manifiesta desde la creación, en el año 2005, del Colectivo universitario contra el olvido. Posteriormente, en el año 2009, se vinculó a este colectivo la asociación ciudadana Memoria de la Transición, formada por vallisoletanos pertenecientes a distintos ámbitos profesionales, culturales y políticos. Finalmente, el desarrollo y consolidación de ambos colectivos permitió la creación, en octubre de 2012, de una asociación nacional memorialista llamada Territorios de la Memoria-España.
En mayo de 2014, Territorios de la Memoria-España firma un convenio con la Universidad de Valladolid, cuya finalidad es el desarrollo de actividades pedagógicas y educativas, de investigación y difusión de memoria histórica. El campo de colaboración comporta la realización de talleres, exposiciones, visitas guiadas, adaptadas a la normativa curricular europea, con el fin de fomentar los valores educativos necesarios para la construcción de una democracia crítica y solidaria. También se desarrollan dentro del ámbito del convenio conferencias, exposiciones, congresos o jornadas que tengan por objeto la Memoria histórica y los procesos de consolidación y avance de las libertades democráticas. El acuerdo contempla además la posibilidad de recoger estas actividades en forma de publicación.
Este convenio forma parte y complementa el convenio de colaboración que se firmó en el 2012 entre la Universidad de Valladolid y el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte para el desarrollo de actividades culturales con el Centro Documental de la Memoria Histórica.
Territorios de la Memoria-España considera que es responsabilidad de todos defender la libertad, la paz y los valores democráticos. Por ello, todos sus proyectos quieren fomentar la concienciación cívica ante los peligros de la propagación de totalitarismos, ideas extremistas y actitudes reaccionarias, que han aflorado e intentan legitimarse en el marco de la actual crisis global. La construcción de una democracia crítica y solidaria preside cualquier proyecto que se enmarca en este lugar de encuentro.